Una pirata y un general que se añoran

 



Germanicus. Entre Marte y Venus.

De Luis Carranza Torres. 


Por Laura Dupraz

Después de habernos quedado con ganas de más con la primera parte de "Germanicus. El corazón de la espada", Luis nos regresa al siglo I d. C., al imperio romano dirigido por Domiciano, un emperador tirano que en esta novela juega un papel importante sin ser el protagonista. Su paranoia y ansia de poder lo llevan a alejar de la ciudad al único hombre que se muestra, sin quererlo, como una amenaza a su poder político. Publio Valerio Aquilio Germanicus acatará como buen romano y militar las disposiciones de su superior, aunque él no se sienta como tal. Aprovechará para encontrar, si no su origen, al menos, a sí mismo; tarea que no le será fácil con una esposa empeñada en encumbrarlo en la mayor posición del imperio, tratando de alcanzar lo que ella, por ser mujer, no puede por sí sola. 

Por otro lado está Kendrya, quien logró tomar las riendas de su vida desde El corazón en la espada y hacerse de un nombre como gladiadora. Ahora mostrará su astucia e inteligencia al convertirse en una gran pirata que domina el Mare Nostrum, zona clave para el comercio romano. 

Pero ni los barcos capturados ni los títulos obtenidos serán suficiente, ni para Kendrya ni para Publio: algo les falta a ambos. 

En esta segunda parte, nuevamente, nos encontramos con detalles de las escenas de acción que nos transportan al pasado, ya sea en tierra o en el mar: las imágenes se construyen en la mente con las descripciones justas. La investigación y el detalle de las costumbres de la época y el funcionamiento de la ciudad quedan plasmados en la historia que se narra, acompañando la trama. 

Los personajes están perfectamente delineados: son, en sus acciones y dichos, fieles al perfil de cada uno, coherentes frente a lo que se espera de ellos. Los más nobles: Publio, Horacio, Clodiano. Los más codiciosos: Valeria, Domiciano, Quinto. 

En esta reseña destaco 2 escenas, emotivas ambas, por lo sutiles. La primera, innecesaria para la trama general y a los protagonistas, pero que es una caricia a los buenos valores. Una madre, rodeada del más alto poder, con un gesto de puro agradecimiento por quien fuera el maestro de su hijo. No llega a completar dos páginas, pero habla del ser agradecidos y reconocer lo bueno recibido.

La segunda escena que destaco nos dice que no importa cuán dañina sea una persona, alguien, en algún lugar, la quiere y la comprende; aunque más no sea en su hora final. 

Son escenas que equivalen a los detalles en una pintura, ese arreglo musical que hace única a una canción. Todo esto, siempre, habla del autor. Sutilmente introducen otras cuestiones en lo que se está contando en primer plano. 

Los que pedimos la segunda parte podemos darnos por satisfechos. Pero sobre el final... ¿Qué costaban 2 renglones más? ¡Qué final!


SINOPSIS

Dos guerreros que toman caminos separados sin dejar de añorarse.

El mejor general de Roma y su peor enemiga pirata son también dos amantes que se separan, que se pierden en los caminos que los alejan de Roma.

Tienen no pocas cuentas a saldar entre ellos. Pero no menos que aquello que se han propuesto llevar a cabo. Por Roma, en un caso. Para destruirla, en el otro.

Amantes y guerreros, enfrentados por el lugar que cada uno ocupa en la sociedad,

que anhelan estar juntos sin que importe el mundo.

De las frías tierras del limes germánicus hasta las bravías aguas del Nostrum Mare.

Pasión, lucha y traición en la Roma imperial de fines del primer siglo de nuestra era.

Entre Marte y Venus, en ese lugar implacable donde se libran todas las batallas.


Publio Valerio Aquilio, estrella ascendente del Senado romano, ha sido enviado a Germania por la ira del emperador que no quiere que nadie pueda hacerle sombra. Lo que para los demás es un exilio, para Publio se transforma en la búsqueda de su origen. Aunque pierda los encuentros secretos con Kendrya.

Kendrya, gladiadora celta que ha ganado la libertad, también escapa de Roma ante la imposibilidad de un lugar allí: no quiere seguir en las luchas en el Coliseo, no quiere más los encuentros clandestinos con Publio que, además, ha partido. Odia a Roma y a los romanos, por lo que asolar el Mediterráneo con actos de piratería le parece una buena forma de venganza.

Cada uno de ellos, guerreros y amantes, busca un destino al que aferrarse en un mundo convulsionado como una tormenta en medio del mar. Entre las sombras de un imperio decadente y las luces de una cultura, entre el despotismo imperial y la silenciosa revuelta, entre Marte y Venus, Kendrya y Publio libran una batalla imposible con ellos mismos.

Luis Carranza Torres retoma personajes y escenarios de Germanicus. El corazón de la espada en esta novela total sobre la Roma imperial, sobre las costumbres, la historia y la vida del siglo I d. C. 




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