El cuadro de una emperatriz muy particular

 

La Emperatriz Teodora. 1887. Detalle del cuadro de Jean Joseph Benjamin Constant. Museo Nacional de Bellas Artes de Argentina.



Por Luis Carranza Torres


En el Museo Nacional de Bellas Artes de la República Argentina, ubicado en la ciudad de Buenos Aires, existe uno de los pocos cuadros respecto de ella. Se trata de un óleo de estilo naturalista y académico, dentro del género del orientalismo y salón, de poco más de dos metros de alto por algo más de uno de ancho, pintado por el francés Benjamin-Constant.

Se trata del gran retrato frontal de la emperatriz Theodora, la mujer más influyente y poderosa en la historia del Imperio bizantino. Sentada en su trono, la bella y seria joven mira con fijeza al espectador. Su rostro coincide con la descripción que aporta la principal fuente acerca de su vida en la Historia secreta de Procopios de Cesarea, que la señalaba como una mujer menuda y grácil con ojos vivaces y deslumbrantes.

Theodora está vestida ricamente, con un atuendo regado de piedras preciosas. En la parte frontal de la túnica se adivinan dos íconos que remiten a su consagración como santa por la Iglesia Ortodoxa y que también la enlazan con el mosaico bizantino del siglo VI de la iglesia de San Vital en Ravena donde fuera retratara.

Se halla sentada en el mismo tipo de trono en mármol blanco que el artista pintara para el emperador Justiniano en otras obras. Una similitud que hace alusión al hecho de ser la primera  emperatriz que fue tratada en un todo como igual de su marido, inclusive el gobierno. 

En el fondo, el detalle de los arabescos ubican la escena en la sede hasta el siglo XII del poder bizantino: el Sagrado Palacio Imperial de Constantinopla. Un edificio que no existía al momento de llevar a cabo la obra, por lo que se supone que la decoración se basó en los muros de la catedral de Santa Sofía.


Su autor, Benjamin-Constant, estudió en la École des Beaux-Arts bajo las órdenes de Alexandre Cabanel y en 1869 comenzó a enviar sus pinturas a los salones anuales. Su inspiración en temas orientales (historia musulmana y la vida en Marruecos), lo llevó hacia 1880 a ejecutar obras pictóricas que tuvieran que por con Bizancio en el período de emperador bizantino Justiniano y su esposa Theodora. Se correpondía con el interés que el bizantinismo suscitó en las letras y la historia francesas como parte de una “fiebre oriental” ocurrida en el último cuarto del siglo XIX en el mundo intelectual parisino. 

Por la época y respecto de Teodora, en 1884 se estrenó la obra teatral que lleva tal nombre, escrita por Victorien Sardou e interpretada con suceso por la popular actriz Sarah Bernhardt.

En el Salón de 1886, Benjamin-Constant expuso un cuadro de Justiniano en el trono rodeado por su consejo. Al año siguiente envió dos obras: un desnudo masculino que representaba a Orfeo y el gran retrato frontal de Theodora. 

La obra fue vendida en Londres en 1909 a £378 y al año siguiente su precio descendió a £52,10, algo que no era extraño en el voluble mercado del arte de entonces. 

Algo, además, que no hace mella en las calidades de la obra. Basta con mirarla para apreciar su calidad e intensidad, fría y punzante a la vez. Tal, como la mujer que refleja.  

Para seguir leyendo:



NOTICIA DEL AUTOR: Luis Carranza Torres nació en Córdoba. Es abogado y Doctor en Ciencias Jurídicas, profesor universitario y miembro de diversos asociaciones históricas y jurídicas. Ejerce su profesión y la docencia universitaria. Es autor de las novelas Yo Luis de Tejeda (1996), La sombra del caudillo (2001), Los laureles del olvido (2009), Secretos en Juicio (2013), Palabras Silenciadas (2015), El Juego de las Dudas (2016), Mujeres de Invierno (2017), Secretos de un Ausente (2018), Hijos de la Tormenta (2018), Náufragos en un Mundo Extraño (2019), Germánicus. El corazón de la espada (2020) y Germánicus. Entre Marte y Venus (2021). Ha recibido la mención especial del premio Joven Jurista de la Academia Nacional de Derecho (2001), el premio “Diez jóvenes sobresalientes del año”, por la Bolsa de Comercio de Córdoba (2004). En 2009, ganó el primer premio en el 1º concurso de literatura de aventuras “Historia de España”, en Cádiz y en 2015 Ganó la segunda II Edición del Premio Leer y Leer en el rubro novela de suspenso en Buenos Aires. En 2021 fue reconocido por su trayectoria en las letras como novelista y autor de textos jurídicos por la Legislatura de la Provincia de Córdoba. 


Lo más leído

Imagen

La foto del 2 de abril

Imagen

La leyenda del Halcón