Pintor de espada en mano

 


por Luis Carranza Torres


"Pinto con una espada en la mano, sintiendo la frialdad de su acero", declaró en una entrevista a Radio televisión española de 2011. Es toda una definición de su arte. 

Si bien al presente es un referente indiscutible en la pintura de tema militar e histórico, su obra y vida resulta más compleja que eso.

Augusto Ferrer Dalmau Nieto nació en Barcelona el 20 de enero de 1964. De madre pintora, estudió la técnica en la “Escuela libre del mediterráneo” con el pintor barcelonés Torrens Lladó. 

Batalla de Algeciras 

A los 17 años se presentó al ingreso en los centros de formación militar del Ejército y llevó su a cabo su servicio militar en Pamplona en 1984.

Confesó, desde siempre que, de chico, “no jugaba al fútbol sino a los soldaditos”. De lo lúdico pasaría al arte, con parada intermedia en los hobbies.

Su vocación por lo militar iba, decididamente, por el lado del arte, lo que lo llevó de muy joven al mundo del maquetismo y al miniaturismo. Tanto lo uno como lo otro influiría no poco en la técnica de sus pinturas, en particular en la cuestión del detalle y exactitud histórica. 

Nieto de un húsar de la Princesa a inicios del siglo XX, su arte le depararía que el Ejército español le otorgara los empleos honoríficos de Lancero de Farnesio y Húsar de Pavía por sus lienzos sobre la caballería española. "La caballería y el ejército español van muy ligados a mi forma de ser y de pensar”, dirá entonces.

De dicha temática particular, Carga de Alcántara es mi preferida. 

De estilo realista y academicista, sus primeros trabajos independientes fueron paisajes, en especial marinas. Luego, influido por la obra de Antonio López, realizó obras de ambientes urbanos.

De dicho período podemos citar respecto de las escenas urbanas Gran Via de Barcelona (1995) y de las poblaciones marítimas Cadaqués (1993).



A fines de la década de 1990 se adentró en la vertiente pictórica que mantiene al presente, focalizándose en la temática histórico-militar.  Sus referentes en la materia resultan dos pintores españoles destacados del siglo XVIII: en primer término el catalán José Cusachs (1851-1908) y luego el gallego Víctor Morelli, (1860-1936).

En 2002 realiza con gran éxito su primera exposición temática de las guerras Carlistas en la galería Arcadia de Madrid, a la que luego seguirían otras tanto en España como fuera de ella, en Nueva York, Francia e Inglaterra.

Inscripto dentro del “realismo pictórico”, que necesita una concienzuda preparación previa con innumerables dibujos, llenos de anotaciones de todos y cada uno de los personajes de sus composiciones, ello lo ha llegado con su arte, a no pocos lugares de guerra. 


El precio de la victoria


De la batalla de Covadonga a las tropas españolas de la ONU en Afganistán en 2011, ha pintado frescos bélicos sobre las más diversas épocas.

En su producción, también la guerra en el mar ha tenido un gran espacio. De tales cuadros destacamos a "El último combate de El Glorioso".

Todas sus pinturas, van precedidas de un periodo no menor de documentación, realización bocetos, toma de apuntes e incluso pintado en los mismos sitios de los sucesos. 

Para "La primera victoria", sobre el triunfo de Pelayo sobre los moros en Asturias, recorrió por días toda la zona. 


Esa pulcritud en el detalle lo ha llevado incluso a zonas de conflictos internacionales, como Afganistán, Siria, Líbano, Malí, Irak o Somalia. En 2012 estuvo durante dicha tarea junto a las tropas paracaidistas del contingente español de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad en Afganistán, en Qala i Naw y en el puesto avanzado de combate de Ricketts, en Moqur, siendo la primera vez que un pintor español participaba de una misión en el exterior de forma oficial y en dicho carácter. 

En las obras producto de esa etapa, se rompe la recreación del pasado para volverse un cronista pictórico del presente y del costumbrismo de una misión de paz.

De este conjunto podemos destacar "La patrulla", de un realismo impresionante, fotográfico.

“Lo que más me motiva es plasmar la historia de España como nación”, señaló Ferrer-Dalmau en una reciente entrevista. Es cierto, pero la profundidad de su arte va más allá y eso explica su éxito en latitudes muy distantes de la península ibérica. Es que retrata como pocos, ese orgullo y los costos de sangre que implica formar parte de una empresa colectiva, de un destino común. Algo que va mucho más allá de una nacionalidad y termina tocando a todas ellas. 



Para leer más en el blog:

Una novela entre la lealtad y la traición


Un amor rebelde en una época convulsa

Los Lobos del Atlántico


El día cero del Mayo Francés


Constanza y la botadura del Bismarck





SOBRE EL AUTOR DE LA NOTA: Luis Carranza Torres nació en Córdoba, República Argentina. Es abogado y Doctor en Ciencias Jurídicas, profesor universitario y miembro de diversos asociaciones históricas y jurídicas. Ejerce su profesión y la docencia universitaria. Es autor de diversas obras jurídicas y de las novelas Yo Luis de Tejeda (1996), La sombra del caudillo (2001), Los laureles del olvido (2009), Secretos en Juicio (2013), Palabras Silenciadas (2015), El Juego de las Dudas (2016), Mujeres de Invierno (2017), Secretos de un Ausente (2018), Hijos de la Tormenta (2018), Náufragos en un Mundo Extraño (2019), Germánicus. El Corazón de la Espada (2020), Germánicus. Entre Marte y Venus (2021), Los Extraños de Mayo (2022) y La Traidora (2023). Ha recibido la mención especial del premio Joven Jurista de la Academia Nacional de Derecho (2001), el premio “Diez jóvenes sobresalientes del año”, por la Bolsa de Comercio de Córdoba (2004). En 2009, ganó el primer premio en el 1º concurso de literatura de aventuras “Historia de España”, en Cádiz y en 2015 Ganó la segunda II Edición del Premio Leer y Leer en el rubro novela de suspenso en Buenos Aires. En 2021 fue reconocido por su trayectoria en las letras como novelista y como autor de textos jurídicos por la Legislatura de la Provincia de Córdoba.



Una ciudad: Londres.
Una mujer cruzada por dos naciones.
Una guerra inesperada.
Un hombre misterioso.
Una historia de espías.
Un amor que no distingue banderas. 

En abril de 1982 nada parece ir bien en la vida de Gabrielle Sterling. La relación con su jefe ha terminado en una desilusión amorosa y su carrera en el servicio civil británico no avanza. Sin embargo, la vida la sorprende cuando un hombre misterioso le hace una propuesta peligrosa. De aceptar, deberá traicionar los principios en que ha sido educada, aunque también rescatará es parte olvidada que su madre le inculcó. 
Tironeada por dos banderas, deberá elegir un bando en un conflicto que día a día se muestra más próximo. En ese proceso, pondrá su propia vida en juego mientras se siente cada vez más atraída por ese hombre misterioso.
En tanto la guerra escala, intrigas, pasiones y acontecimientos imprevistos la llevarán donde nunca antes había pensado estar, mientras quienes la persiguen se hallan más cerca de descubrirla. 
En medio de esa incertidumbre, Gabrielle se sentirá más viva que nunca. Tal vez no esté traicionando a nadie, sino encontrándose, por primera vez, consigo misma.  


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